Hoy es el día de la madre. Espero que la hayáis felicitado y dado un beso y un abrazo enorme. Se lo merece. Hay que ayudar a nuestras madres siempre, pero hoy más que otros días, intentar hacerle el día fácil: ayudar a poner la mesa y recogerla, hacer vuestra cama, recoger los juguetes y ropa del suelo. Recordar que también es vuestra casa y no solo suya. Decirle a menudo que la quieres y dale un abrazo, al menos, una vez al día. Las madres son lo mejor 🙂 Y en lecciones en familia, hoy comenzamos la historia de José.

Introducción

La semana pasada estuvimos hablando de unos hermanos: Esaú y Jacob. ¿Cuántos hermanos tienes tú? ¿Uno?¿Dos? ¿Tres? ¿Son chicos o chicas? ¿Mayores o menores que tú? Pues hoy vamos a hablar de otros hermanos. Estos no eran dos, tres, cinco, ni siquiera 10. ¡Eran doce hermanos! ¿Te imaginas vivir estos días con tantos hermanos? Estaría genial. Siempre tendrías compañía para jugar a la pelota, a los videojuegos, ….

Pero como vimos la semana pasada, a veces los hermanos no se llevan bien y la familia que vamos a conocer hoy, le pasaba lo mismo. Pero Dios lo usó para bien. ¿Queréis saber cómo? Pues vamos a escuchar la historia

Lección

Jacob vivió muchos sucesos cuando tuvo que huir de su casa. Podéis leerlo en la Biblia para conocer más sobre ellos. Y entre esas cosas que le pasaron, se casó y tuvo…. ¡12 hijos!. Y de esos 12, tenía un favorito. Parece que no aprendió bien de los errores de sus padres 🙁

Él amaba a José y lo demostró regalándole una túnica de muchos colores. En aquellos tiempos, no era fácil ni barato poner color a las ropas. Era un regalo especial. Pero como pasó cuando Jacob y su hermano Esaú eran pequeños, los demás hermanos le tenían un poco de tirria y no lo trataban bien.

Pero además, es que José no fue sabio tampoco y les contó dos sueños que tuvo, sin callarse nada. “Hermanos, he soñado que estábamos en el campo cada uno recogiendo trigo. Y que mi gavilla se enderezaba y las vuestras se inclinaban delante de mí”. Os podéis imaginar que a sus hermanos no les hizo ninguna gracia. Y más cuando unos días tardes, otra vez José les contó otro sueño. “Familia, esta vez era un sueño en que el sol, la luna y 11 estrellas se inclinaban delante de mí”

“Pero ¿tú que te crees? ¿Que vas a estar sobre nosotros? ¿Que vas a ser más que nosotros?” Anda, déjanos en paz. Porque todo esto hacía que sus hermanos tuvieran más envidia de él.

Así que un día, Jacob le dijo a su hijo José que fuera a ver cómo estaban sus hermanos quienes estaban pastoreando ovejas en una región más lejos. Y José fue a comprobar cómo estaban ellos y las ovejas. Pero, cuando sus hermanos le vieron llegar, no les hizo mucha gracia. “Mirar este soñador, ya viene para contarle a papá lo que estamos haciendo. ¿Por qué no nos deshacemos de él? Matémosle” Pero Rubén, el hermano mayor, dijo que no lo matasen, que lo dejasen en una cisterna de agua que estaba vacía cerca de ahí. Él pensaba ir más tarde y sacarle.

Así que los demás hermanos hicieron así. Quitaron a José la túnica de colores y lo metieron en la cisterna de agua vacía. Luego, Rubén se fue a hacer un recado, y ellos se pusieron a comer tan tranquilos. Mientras comían, vieron venir a una caravana de mercaderes que se dirigía a Egipto. Y entonces se les ocurrió: “Oye, ¿Qué os parece si vendemos a José y así nos sacamos un dinero? De esta manera, no nos deshacemos nosotros de él”. Así fue como hicieron: vendieron a José a los mercaderes quienes se lo llevaron a Egipto.

Cuando Rubén fue a la cisterna con la intención de sacar a José del pozo, no lo encontró y se desesperó. “Pero ¿qué habéis hecho? ¿Cómo le decimos ahora a nuestro padre?” Como tuvieron miedo de contar a su padre lo que habían hecho, tomaron la túnica de colores que le habían quitado a José, la rompieron y la mancharon con sangre. Con esta prueba, convencieron a su padre de que José había muerto atacado por algún animal. Cuando Jacob recibió la noticia lloró mucho y estuvo triste durante un largo tiempo.

Sin embargo, José no había muerto. Cuando llegó a Egipto, fue vendido a Potifar, capitán de la guardia del Faraón. Allí sucedieron varios acontecimientos que os contaremos la próxima vez.

Conclusión

Hay veces que pasan hechos que no nos gustan; a nosotros o a gente de nuestro alrededor. A veces suceden cosas que no nos parecen justas, pero Dios sigue en control y ve el cuadro completo. Él sigue con nosotros en medio de todo el proceso y nos cuida. No significa que esté de acuerdo con lo que nos ocurre, pero sí que Él es capaz de hacer que salga algo bueno de todo. Solo tenemos que confiar y descansar en que Él está de nuestro lado.

Es cierto que de vez en cuando hay que esperar u tiempo y tener paciencia antes de ver el resultado final bueno para nuestras vidas y los que nos rodean. Pero como hemos visto en la lección de Abraham, Dios siempre cumple sus promesas. ¿Te atreves a creerle a Él aún en medio de situaciones difíciles?

Versículo

Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien

Romanos 8:28

Actividades

Como hemos dicho en anteriores semanas, elegir la actividad que mejor se adapte a la edad de vuestros menores, y ¡a disfrutarla!

1. Flores de papel para mamá. Ayúdate del siguiente tutorial: Flores de papel fáciles.
2. Invéntate una canción cuyo estribillo sea el versículo
3. Diseña tu propia túnica. ¿Cómo te gustaría que fuera? ¿Qué colores? ¿De qué material sería?
4. ¿Te animas a hacer un baile con los sueños de José? Busca una música sin letra y a por ello.
5. Visualiza el siguiente vídeo: «El día a día de un pastor«. ¿Qué te ha parecido? Si fueras un pastor, ¿qué es lo que más te gustaría¿ ¿Y lo que menos?
6. Lee la historia de José en la Biblia. Se encuentra en Génesis 37:1-36.
7. Reflexiona un poco sobre la familia de José. ¿Te parece que era una familia feliz? ¿Por qué sí o por que no? ¿Qué puedes hacer tú para que tu familia sea feliz?
8. Mira el siguiente vídeo sobre la envidia de una hermana: «Spellbound» ¿Qué fue lo que consiguió acabar con el «bicho»? ¿Crees que el amor y el perdón pueden vencer cualquier cosa? ¿Qué piensas sobre la envidia? ¿Es posible que amargue el carácter? Háblalo con tus padres y hermanos.
9. Cuando se trabaja juntos, por un objetivo común, es más difícil que los sentimientos negativos te dominen. Prueba este juego en un pasillo o en círculo en el salón: carrera de tres patas. Poneros en parejas uno al lado de otro. Luego, ataros las piernas que están juntas: la izquierda de uno y la derecha del otro. A continuación, tenéis que hacer el recorrido señalado. Gana la pareja que tarde menos tiempo en cubrir el recorrido. Te darás cuenta de que si no te pones de acuerdo con tu pareja, no va a ser fácil caminar. Mucho menos andar rápido.
10. No te olvides del Concurso de arte de la Costa Daurada. ¿Has escogido ya lo que vas a hacer? Aquí tienes toda la información: Bases del Concurso.
11. Colorea la túnica de José siguiendo el código de colores. Descárgate la plantilla de debajo.

Mas información

Aula de ideas. Juegos de cooperación.

Entrevistas a pastores de ovejas. Para saber más sobre los pastores de ovejas.

Iglesia de la Costa Daurada. Departamento de Ministerios Infantiles. Equipo Multimedia.

Izelita Banderas. Canal de YouTube. Flores de papel fáciles y bonitas.

Manualidades bíblicas. Aprendiendo la palabra de Dios a través de manualidades creativas.

Pontón, Marcel. Dinámicas familiares a través de la vida de José. Barcelona: Clie, 2016.